Moción por un cambio en el modelo de gestión del Centro Municipal de atención animal de Las Rozas
El grado de civilización de una sociedad tiene algo que ver con el trato que dispensamos a los animales.
En nuestro municipio albergamos algo más de once mil animales de compañía, lo cual nos proporciona una idea del apego que tenemos hacia ellos.
Este apego se traduce en una sensibilidad especial hacia su cuidado y bienestar, hasta llegar al punto de considerarlos un miembro más de nuestra familia.
Este sentimiento de cuidado y respeto hacia los animales ha producido la fundación de innumerables asociaciones protectoras de animales que promueven su bienestar, su consideración como compañeros e incluso la proclamación de la Carta de Derechos de los Animales.
De este modo no es extraño que una de sus actividades principales sea la de denuncia sistemática de todas aquellas acciones lesivas hacia los animales.
En este punto, estas asociaciones velan con especial cuidado por los centros municipales de acogida de animales que llegan a ellos porque han sido abandonados por personas irresponsables o por aquellas personas que deciden entregarlos por no poderlos atender debidamente.
A la hora de externalizar los servicios de los centros municipales de atención animal, se considera prioritario que la entidad que se encargue de su explotación sea una sociedad protectora frente a una empresa mercantil, debido fundamentalmente a que el ánimo de una y otra es muy distinta: mientras que la primera vela por el cuidado y el bienestar de los animales que tienen alojados, la empresa mercantil, lógicamente, tiene en el ánimo de lucro su principal interés.
Es el contraste entre criterios proteccionistas y el ánimo de lucro.
Mientras que la empresa privada captura el animal que molesta en la calle, la protectora de animales rescata el animal abandonado.
Los animales son almacenados, generalmente, en jaulas pequeñas, sucias y frías, con el suelo permanentemente mojado donde pasa el día y se tumba para dormir. Por el contrario, la gestión de una protectora de un centro de atención animal hace que el alojamiento de los animales se realice un chenil limpio, con una temperatura adecuada, con elementos para el entretenimiento, y una colchoneta para dormir.
Mientras que la empresa mercantil alimenta a los animales con despojos o piensos de baja calidad y en cantidad insuficiente, la protectora vela por una alimentación de calidad con un pienso especializado y suficiente, atendiendo a la especie, tamaño y estado de salud del animal.
Los animales son manejados de manera inadecuada, lo que produce que el animal termine aterrorizado. Las protectoras manejan a los animales desde la perspectiva de que se trata de un ser vivo y sensible, por lo que son tratados con cariño, afecto y respeto.
El mantenimiento del animal en un centro de atención municipal gestionado por una empresa privada se mantiene por un período de entre diez y quince días. En cambio, en estos centros gestionados por una protectora se les mantiene vivos hasta que aparezca la persona o familia adecuada para su adopción.
Finalmente, las empresas mercantiles prestan, en general, una baja atención veterinaria, ya que pretenden ahorrar en costes y se tiene en perspectiva el sacrificio del animal. Por el contrario, las protectoras velan por una asistencia veterinaria plena: se les desparasita, vacuna, esteriliza y se atiende a las enfermedades que pueda sufrir el animal.
Así, nuestro Grupo Político es partidario de que la gestión del Centro Municipal de Atención Animal de Las Rozas sea llevada a cabo por una asociación protectora de animales, ya que debe ser prioritario el cuidado y bienestar frente al ánimo de lucro.
Por todo lo anterior, proponemos el siguiente
ACUERDO
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Que la próxima licitación de la gestión del Centro Municipal de Atención Animal sea realizada a través de la figura de un Convenio de Colaboración con alguna asociación protectora de animales de la Comunidad de Madrid.
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Que sea realizada una inspección del Centro Municipal de Atención Animal por parte del Servicio de Protección de la Naturaleza, -SEPRONA-, de la Guardia Civil, garantía de independencia y objetividad, con el fin de acallar las diversas noticias, sucesos y rumores sobre la situación actual del citado Centro.