Día internacional de la mujer trabajadora
Este 8 de marzo, como todos los años, celebramos el Día Internacional de la Mujer, enmarcado en un contexto histórico y político lleno de dificultades para la sociedad, pero más para las mujeres en particular.
Un contexto marcado por el ascenso de la extrema derecha, dominado por grandes multinacionales, fortunas, monopolios y mercados… que supone para las mujeres la paralización de casi todas las políticas públicas encaminadas a conseguir mayores cotas de igualdad, y aún peor, el avance de una cultura que menosprecia la idea de la igualdad como el principal principio para la convivencia.
Ante este panorama, desde Izquierda Unida entendemos que es más importante que nunca una apuesta firme por el feminismo como pilar fundamental de la transformación social. Es imprescindible el reconocimiento de la lucha feminista, que persigue el logro de la igualdad real, desde el respeto a la diversidad.
Una lucha feminista que modifica la política, transformando sus objetivos en universales, que trasgrede los roles preestablecidos y persigue la libertad y autonomía de las mujeres a través del compromiso político colectivo.
Una lucha feminista en contra de la precariedad laboral y en contra de la feminización de la pobreza impuesta a las mujeres a lo largo de toda su vida, desde su formación hasta la jubilación. Una lucha que defiende trabajos y salarios iguales, que rompe el techo de cristal, que dice no ante la utilización de las pensiones como herramienta de sometimiento a la mujer y que se niega a aceptar que existan personas de segunda clase. Que lucha contra la continua utilización de las mujeres como objetos, como mercancía, ya sea a través de la explotación sexual o alquilando nuestros úteros.
Necesitamos de la práctica y la política feminista, con acuerdos que lleven aparejados los instrumentos y presupuestos necesarios para la consolidación de los avances alcanzados y la consecución de los derechos aún pendientes, que tenga su plasmación en el ámbito laboral, educativo, sanitario, económico, cultural … enfocados desde la perspectiva de género, para la consecución de un mundo sin desigualdades.
Desde Izquierda Unida apostamos por un feminismo que desposea al patriarcado de sus privilegios, única forma de que las mujeres logremos la igualdad. No queremos esperar “tiempos mejores”, queremos conseguir todos nuestros derechos ¡YA!
IGUALDAD #LuchaFeminista